Conocido por ser un zapato masculino, el mocasín se ha convertido en una pieza para todos los géneros, llamando la atención entre las mujeres de los años 90, gracias a su toque de estilo. A pesar de tener un aspecto más masculino, la pieza es una gran opción para los looks femeninos y crea una mezcla de estilos muy interesante. Aún con sus características rústicas, los mocasines pueden usarse prácticamente en cualquier ocasión, ya que los encontramos en diferentes modelos, desde los tradicionales con suela plana y colores tierra, hasta los más atrevidos con tacones o coloridos. Los mocasines se pueden combinar fácilmente con looks para cualquier temporada, además son casual y súper cómodos, por lo que son una gran opción para el día a día